105 aniversario de la creación de la Fuerza Aérea Argentina

Subjefe de Estado Mayor General Brigadier Testoni
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Por Comodoro (R) VGM D. Marcelo CONTE


En el día de hoy se cumplió el aniversario número 105 de la creación de la Fuerza Aérea Argentina, y el acto central se realizó en la Escuela de Aviación Militar.

A pesar de haber estado invitado al acto, por razones personales no pude asistir como era mi deseo, y lo lamenté sobremanera.

La Fuerza Aérea para mí puede resumirse como aquel hermoso espacio, detrás de las torres blancas, todo un símbolo del instituto Madre, con los bien cuidados jardines, los edificios blancos con techos de tejas, todo esto cobijado con la enorme bandera que flamea en la plaza de armas del Cuerpo de Cadetes. Más atrás asoman los hangares del Grupo Aéreo, donde laten los corazones de todos nosotros. Digo esto porque todos los que cruzamos alguna vez a través de esas torres, vestidos de civil y con el espíritu henchido de orgullo, pero lleno también de dudas y porqué no, de temores ante la nueva vida que nos esperaba, encontramos lo que estábamos buscando durante nuestra adolescencia.

Pero también al poco tiempo de nuestro ingreso como cadetes, nos dimos cuenta que la carrera que habíamos elegido no era para todos, permaneciendo en la Escuela solo quienes estábamos apuntalados por una verdadera vocación, que nos sostuvo firmes a pesar de la dura vida que al principio enfrentamos.

La EAM pasó a ser nuestro segundo hogar, donde conocimos a nuestros compañeros, en realidad nuevos amigos, con los que algunos tenemos la satisfacción de seguir en contacto después de sesenta años transcurridos hasta hoy desde la vez que nos vimos por vez primera en nuestra querida Escuela.

En realidad, podría seguir escribiendo horas sobre mi vida en la Fuerza Aérea, cosa que llevaría muchísimas páginas. Prefiero agradecer a la Fuerza Aérea el haberme formado como una persona de bien, inculcándome una serie de valores que me acompañan hasta ahora, el valor de la amistad, la solidaridad, el compañerismo, y la vocación inclaudicable de servir a mi patria integrando la Fuerza Aérea.

A través de la dura prueba a que nos sometió la guerra por las Islas Malvinas, todos los hombres y mujeres que pertenecemos a la FAA obramos de la misma manera y sin claudicar en ningún momento en el cumplimiento de nuestro deber: No hubo juramento mejor cumplido que aquel que hicimos en nuestros comienzos en la Fuerza…»seguir nuestra bandera y defenderla hasta perder la vida». Esto demostró fehacientemente la extraordinaria formación del personal, en los dos Institutos que son los pilares de la Fuerza Aérea Argentina: la Escuela de Aviación Militar y la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea.

Mirando retrospectivamente mi vida, pienso que esta fue la vida que siempre quise vivir….sin ninguna duda.

Es mi deseo que todos los integrantes de la Fuerza Aérea, cada uno en su momento, al mirar para atrás pueda decir lo mismo que yo.

 

¡¡Feliz día para todos los integrantes de la Fuerza Aérea Argentina!!