Cadete II Año IGNACIO NAZARUK
El 3 de junio se llevó a cabo en la Escuela de Aviación Militar, una de las ceremonias más importantes del año, la Entrega de Uniformes y sables a Cadetes de I Año, junto con el ascenso de Suboficiales Cadetes Encargados de Compañía y Cadetes de IV Año que se desempeñan como Encargados de Sección.
La ceremonia comenzó con los efectivos formados en la plaza de armas Gral. San Martín al Señor Director General de Educación de la Fuerza Aérea Argentina, Brigadier D. Marcelo Guerrero, junto con el Subdirector General de Educación, Comodoro Mayor D. Héctor Gutik, Director de la Escuela de Aviación Militar, Comodoro Mayor D. Marcelo José Monetto, Subdirector de la Escuela de Aviación Militar, señores jefes de grupo, personal militar superior y subalterno, personal civil, docente e invitados especiales.
En la ceremonia se realizó el ascenso al grado inmediato superior de los Suboficiales Cadetes y Cadetes de IV Año. Inmediatamente, el Capellán de la Escuela de Aviación Militar, Monseñor D. Germán Carmona, efectuó la tradicional invocación religiosa bendiciendo los uniformes y sables. Posterior a ello, se hizo una distinción para aquellos Cadetes de I Año extranjeros de la República de Panamá y Paraguay por parte de las autoridades correspondientes, y para terminar el curso de I Año adoptó el dispositivo para la entrega de sables.
Luego se realizó el desfile terrestre de los cadetes de la Escuela de Aviación Militar frente al palco de autoridades, entonando la marcha que los identifica “Alas Argentinas”.
Finalizada la ceremonia, el Señor Director de la Escuela de Aviación Militar, dirigió unas palabras alusivas a los Cadetes de I Año, inspirándolos a seguir en este camino lleno de orgullo, valores y sacrificios, pero a su vez, de grandes recompensas.
La ceremonia de entrega de uniformes y sables sigue siendo la más significativa en la vida de un militar, aquellos que hemos tenido la oportunidad de cruzar esas imponentes dos torres de ingreso al instituto y formar parte del Cuerpo de Cadetes, mantenemos el vivo recuerdo de aquel momento tan preciado, donde se cierra un ciclo, y se abre un camino por transitar, consagrándonos oficialmente parte de esa gran familia aeronáutica.
