Homenaje a un Gran Precursor

Con motivo de conmemorarse el 51º Aniversario del fallecimiento del Brigadier General Bartolomé DE LA COLINA, se llevó a cabo la ceremonia en la Escuela de Aviación Militar el pasado jueves 28 de junio. Presidida por el Jefe de la Guarnición Aérea Córdoba, Brigadier José María ACTIS, quien estuvo acompañado por los Jefes de Organismos de la Guarnición Aérea Córdoba, Jefes de Grupo y Personal Militar y Civil de la Escuela de Aviación.

El capellán del Instituto, Monseñor Germán CARMONA, fue el encargado de realizar la invocación religiosa y el Vicecomodoro Daniel RODRÍGUEZ dio lectura a la biografía del Brigadier General.

Reseña de la importante tarea que llevó a cabo DE LA COLINA

Nacido en La Rioja en 1894 y dueño de una admirable vocación, el joven Bartolomé DE LA COLINA egresó como subteniente de artillería del Colegio Militar de la Nación, al que regresaría como instructor luego de haber sido destinado en el Regimiento Nº4 de Artillería Montada.

Luego de aprobar un curso especial hacia enero de 1921 se incorporó a la Escuela de Aviación de El Palomar.

En enero de 1922 y con el grado de Teniente recibe el diploma de Aviador Militar y permanece en el Grupo I de Aviación, como auxiliar de la sección fotografía, además de ser adscripto a la escuadrilla de caza. Durante éste período realizó los vuelos de aplicación, con el objeto de explorar las rutas aéreas hacia los cuatro puntos cardinales de la Argentina.

Cabe mencionar entre sus hazañas la que realizó con cinco biplanos SVA 5, uniendo El Palomar, Mendoza y San Juan, regresó recorriendo 2568 km en 18 horas 57 minutos.

Ya como Teniente Primero en 1922, fue comisionado a Francia donde se especializó en trabajos fotográficos, armamento y tiro de aviación, además de inscribirse en le Escuela Superior de Aeronáutica.

En 1926 realizó una pasantía en la Fábrica de Aviones de DasaultBreguet, donde se graduó de Ingeniero Aeronáutico en el año 1927 con el grado de Capitán.

De regreso en nuestro país se desempeñó en la Fábrica Militar de Aviones alcanzando el cargo de Director de Aerotécnica. Luego de unos meses de prestar servicio y con su título de Ingeniero Militar validado por el Ejército, continuó su tarea en la Dirección General de Material Aeronáutico. Por ese entonces había ascendido al grado de Mayor y cabe destacar que durante su gestión, en 1936, se desarrolló la primera serie de aviones nacionales.

Durante ese año el Mayor DE LA COLINA organizó en secreto el vuelo de ensayo del avión nacional AE.C.1, realizando luego la presentación oficial.

Posteriormente se desempeñó en diferentes destinos en el cuartel maestre y desempeñó funciones como Director de Material Aeronáutico, y como Comandante en Jefe de Aeronáutica gestionó la transición entre el arma de Aviación y la Secretaría de Aeronáutica.

Con el grado de Brigadier en 1945 fue nombrado primer Secretario de Aeronáutica, siendo promovido al grado de Brigadier Mayor. En 1946 ejerció el cargo de Ministro Secretario de Estado de Aeronáutica, hasta que en 1949 se retiró como Brigadier General.

Acompañado por aviadores militares, fue responsable del ambicioso proceso de organizar una nueva Fuerza Armada y de desarrollar la totalidad de los campos tanto normativo, doctrinario, material, técnico, de apoyo al vuelo e infraestructura.

Cinco años después, la Fuerza Aérea Argentina era la mejor equipada y adiestrada de América del Sur.

Merecedor de reconocimientos como los diplomas de Oficial de Estado Mayor tanto de Aeronáutica como de Ejército ambos honoris causa. En 1966 por ley N° 17002 fue reconocido como precursor de la aeronáutica argentina. EL Brigadier General DE LA COLINA falleció el 28 de junio de 1967, siendo sin dudas uno de los fundadores de la Fuerza Aérea Argentina.